Este es un fragmento de la película "Lugares comunes".
Como futuros
maestros resulta interesante la reflexión que nos propone el
protagonista de la película, sobre qué significa enseñar.
No duda cuando dice que enseñar es "dar el método para entender, analizar, razonar y cuestionar" la información.
Hablamos
de crear espíritus críticos, que no aprenden de memoria sino que
construyen aquello que aprenden a partir de la reflexión y
cuestionamiento.
La misión que como maestros nos invita a
"auto-imponernos" el personaje merece una consideración; "Despierten en
sus alumnos el dolor de la lucidez".
Con el dolor de la lucidez se
refiere al "dolor" que implica saber, cuestionar, dudar...Los conflictos
internos que nos poseen cada vez que no encontramos respuestas a
nuestras preguntas. El dolor de la lucidez, es el dolor que genera ser
crítico, crítico con la vida y crítico con uno mismo. La lucidez es
querer seguir aprendiendo toda la vida, aunque duela, aunque cueste...
"La lucidez es un don y un castigo"
El título del Blog ya nos invita a esta misma reflexión; Quien nada duda nada sabe.
Hagamos
de nuestros alumnos seres críticos, independientes, que piensen por sí
mismos, que sepan discernir la mera información del verdadero
conocimiento,en definitiva, que sean personas "lúcidas".
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